Todos los que estamos en contacto con el mundo del toro, somos conscientes de que una cornada, o una cogida está a la orden del día.
Pero aun siendo conscientes de ello, nos resignamos a creer que le puede pasar a las personas que queremos.
Hace escasos días, el cortador salmantino Chema Sánchez lo pudo vivir en primera persona. Un cortador, que permítanme que dude en si es mejor cortador o mejor persona. ¡Bendito el día en que te conocí amigo! Ya saben lo que dicen…quien tiene un amigo tiene un tesoro, y no saben lo afortunada que soy de tener un amigo así, un amigo que ya forma parte de mi familia.
Les debo confesar que no hay que cosa que más me guste, que escuchar a aquellas personas que saben del toro, a las entendidas de verdad. Chema es una persona que ama el toro por encima de todo, que pese a su juventud parece que tiene una hemeroteca implantada de la que disfruta compartiendo.
Como persona podría estar todo el día alagándole, él ya sabe lo que pienso. Como cortador, personalmente le admiro, siempre con las ideas claras, teniendo claro cuál es su estilo, y defendiéndolo sea en la plaza que sea. La vida en ocasiones es cara o cruz, y esta vez la moneda mostró su cara más fea, privándole de lo que más le gusta. Pero solo temporalmente, porque querer es poder, y estoy segura de que pronto le veremos dando lo mejor de sí mismo.
Te lo he dicho y te lo vuelvo a decir… ¡Pronta recuperación torero! ¡Puedes con esto y con más!
Victoria
Foto: Juanes
Foto: Javier Bernal
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